Blog Católico de Javier Olivares, jubilado
LA HISTORIA DEL CARPINTERO
(Ap. de nuestro amigo José Guadalupe Torres)
Había una vez un viejo carpintero que, cansado ya de tanto
trabajar, estaba listo para acogerse al retiro y dedicarle tiempo a su familia.
Así se lo comunicó a su jefe, y aunque iba a extrañar su
salario, necesitaba retirarse y estar con su familia; de alguna forma
sobrevivirían.
Al contratista le entristeció mucho la noticia de que su mejor
carpintero se retiraría y le pidió de favor que si le podía construir una casa
más antes de retirarse.
El carpintero aceptó la proposición del jefe y empezó la construcción
de su última casa pero, a medida que pasa el tiempo, se dió cuenta de que su
corazón no estaba de lleno en el trabajo.
Arrepentido de haberle dicho que sí a su jefe, el carpintero no
puso el esfuerzo y la dedicación que siempre ponía cuando construía una casa y
la costruyó con materiales de calidad inferior.
Esa era, según él, una manera muy desafortunada de terminar una
excelente carrera, la cual le había dedicado la mayor parte de su vida.
Cuando el carpintero terminó su trabajo el contratista vino a
inspeccionar la casa.
Al terminar la inspección le dió la llave de la casa al
carpintero y le dijo: "Esta es tu casa, mi regalo para tí y tu familia por
tanto años de buen servicio".
El carpintero sintió que el mundo se le iba...
Grande fue la verguenza que sintió al recibir la llave de la
casa, su casa. Si tan sólo el hubiese sabido que estaba construyendo su propia
casa, lo hubiese hecho todo de una manera diferente.
Así también pasa con nosotros. A diario construímos relaciones
en nuestras vidas, y en muchas ocasiones ponemos el menor esfuerzo posible para
hacer que esa relación progrese.
Entonces, con el tiempo es que nos damos cuenta de la necesidad
que tenemos de esa relación.
Si lo pudiésemos hacer de nuevo, lo haríamos totalmente
diferente. Pero no podemos regresar.
Tú eres el carpintero. Cada día martillas un clavo, pones una
puerta, o eriges una pared.
Alguien una vez dijo: "La vida es un proyecto que haces tu
mismo. Tus actitudes y las selecciones que haces hoy construyen la casa en la
cual vivirás mañana". ¡Construye sabiamente!
Recuerda... trabaja como si no necesitaras el dinero; ama como
ni nunca te hubiesen herido; baila como si nadie te estuviera observando...
Para el mundo tal vez tu seas una sola persona, pero para una
persona tal vez tú seas el mundo...
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