sábado, 17 de octubre de 2020

Blog Católico de Javier Olivares, jubilado

Jesús Mateo es un Sacerdote amigo de Valladolid, que me manda diariamente  un lindo comentario del Evangelio.

Pienso que vale la pena compartirlo con los sacerdotes y con  los seglares que lo soliciten.

Lo pongo todos los días en dos de mis Blogs católicos. Franja

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18 de octubre, domingo de 2020



Comentario del Evangelio: "DAD AL CÉSAR LO QUE ES DEL CÉSAR Y A DIOS LO QUE ES DE DIOS" (Mt 22, 15-21).

Esta respuesta es extraordinaria y conocida por todos

Sabemos que los fariseos criticaban la vida y la predicación de Jesucristo y no creían que fuese el Mesías. Era un odio auténtico lo que sentían por el Señor.

Hoy, unidos a los herodianos, que en el fondo eran enemigos, le preparan una trampa con la idea de cazarlo en alguna contestación comprometedora.

Los herodianos eran partidarios de la política de Herodes y su dinastía, y veían de buen grado la dominación romana. Los fariseos, al contrario, eran extremadamente antirromanos, y consideraban a Herodes como un usurpador.

 


La pregunta es esta: "Maestro, ¿es lícito pagar impuesto al César o no?"

 La pregunta es capciosa.

Si Jesús contesta que es lícito pagar el tributo al César, tendrán motivo para acusarle de ser partidario de la ocupación de Israel por los romanos; en caso de respuesta negativa, dirán que no respeta el orden político establecido.



Jesucristo sale airoso de la prueba. Les dice: "Dad al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios".

¿Qué es lo que corresponde al César?

El tributo necesario para la existencia y sostenimiento  del ordenamiento temporal.

Jesucristo, con esta respuesta, reconoció el poder civil y sus derechos.

¿Qué es lo que hay que dar a Dios? 

A Dios hay que darle TODO.

Él es el señor de todo, puesto que hemos sido creados por Él, a su imagen y semejanza.

Le pertenecemos totalmente. Nos ha dado el ser y nos mantiene la vida.


Él es el que nos ha dado todo lo que somos y tenemos.

Y nos ha creado de forma singular, personal e irrepetible, a imagen de Dios.

Por consiguiente, tengo que darle a Dios toda mi vida, todo mi amor, porque PERTENEZCO  TOTALMENTE A ÉL.

Hago mías las palabras de Santa Teresa: "Vuestra soy, para Vos nací".

A Dios le debo adoración y amor. He de amarle con todo el corazón, con todo el ser, con toda mi alma; sobre todas las cosas.

En Él, y sólo en Él, está mi felicidad presente y futura.

Jesús Mateo. Sacerdote.

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Que Dios pague este  esfuerzo diario y que Santa María la Virgen no nos abandone  nunca.

Que el Señor nos bendiga y nos guarde. Un abrazo.   Franja.

Confeccionado por Franja.

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