D. Jesús Mateo, sacerdote de Valladolid me envía el Comentario del Evangelio de cada día, y yo con gran placer lo edito en mis blogs católicos de difusión. Sé que hay muchas entradas porque muchos lo reciben y comparten para ayudarse en su tiempo de oración.
P. Javier Olivares.
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10 de mayo, miércoles 2023
DIJO JESÚS A SUS DISCÍPULOS: "YO SOY LA VID, VOSOTROS LOS SARMIENTOS". (Jn 15, 1-7)
Es una alegoría bonita, preciosa. Los que descendemos del campo entendemos muy bien esta alegoría de la vid y los sarmientos. Dice Jesús: yo soy la vid, vosotros los sarmientos. El que permanece en mí, y yo en él, ese da fruto abundante, porque sin mí no podéis hacer nada.
Tú y yo unidos a Cristo, la vid, podemos dar fruto abundante. ¿Lo estamos dando o nuestra vida es una vida estéril?
También nos dice el Señor que a todo el Sarmiento que da fruto lo poda, para que dé más fruto. Aún recuerdo, yo era un niño, ver podar a uno de mis hermanos. Me hizo ver que era necesaria la poda para que la viña diera más fruto y se rejuveneciera.
Hoy, pensando en la "poda", me da miedo, Señor, que me "podes", que metas la tijera de podar y quites de mí todo lo que me estorba para dar frutos de santidad.
La viña, me comentaba, "llora" cuando el labrador la poda. Ahora, entiendo más que entonces, que también yo lloro cuando el Divino Labrador, Cristo, corta mis defectos, mis pecados y me exige más santidad, más y mejores frutos de santidad.
Termina el Evangelio de hoy diciéndonos que a los sarmientos que no permanecen unidos a la vid los tiran y se secan y luego los echan al fuego, y arden. Tú y yo, ¿estamos unidos a la vid? ¿Estamos dando frutos de santidad? Dejémonos "podar" por Nuestra Señora.
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Que el Señor nos bendiga y nos guarde con Santa María la Virgen y con San José su castísimo esposo.
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