Hoy D. Jesús Mateo me envía el presente comentario:
<{☆●☆}>
4 de agosto, miércoles 2021
COMENTARIO DEL EVANGELIO: JESÚS LE DIJO: "MUJER, ¡QUÉ GRANDE ES TU FE!" (Mt 15, 21-28).
El Evangelio de hoy es una preciosidad. Es una maravilla. Los protagonistas son Jesús y una mujer, "la cananea", madre de una hija enferma. Al ver a Jesús se puso a gritarle: Ten compasión de mí, Señor, Hijo de David. Mi hija tiene un demonio muy malo. Y, grita y grita y no deja de gritar, pero Jesús no le responde. Tanto grita que los Apóstoles le piden a Jesús que la atienda para que deje de gritar y no les moleste más. El Señor les contesta que en primer lugar El ha venido para atender a las ovejas descarriadas de Israel.
Yo no sé si esta mujer oyó la contestación de Jesús, lo que sí es cierto es que ella se acercó y se postró ante el Señor diciendo : Señor, ayúdame. ¡¡¡Qué oración más humilde y sencilla!!!
La contestación de Jesús, en principio, fue desconcertante. Le dice: "No está bien tomar el pan de los hijos y echárselo a los perritos". Esta madre, en vez de ofenderse y desanimarse, le dice con humildad: Tienes razón, Señor; pero también los perritos se comen las migajas que caen de la mesa de los amos".
A mí me entusiasma esta contestación, y a Nuestro Señor le ganó el corazón. Fíjate el piropo y la felicitación que le hace: "MUJER, QUÉ GRANDE ES TU FE; QUE SE CUMPLA LO QUE DESEAS". El Evangelio termina diciendo que "en aquel momento quedó curada su hija".
¿No te parece que el diálogo entre Jesús y esta mujer es de una belleza incomparable? Y, qué fe la de esta madre. Pide, sin desanimarse, por su hija, aunque le parezca que Jesús no la atiende. Gran ejemplo para todos y, si cabe más, para las madres.
Jesús Mateo. Sacerdote.
<{☆●☆}>
Que Dios pague ese esfuerzo diario y que Santa María la Virgen no nos abandone nunca. Franja.
<{☆●☆}>
☆☆☆☆☆☆☆☆☆☆
No hay comentarios:
Publicar un comentario